LGBT: Una noche de chicas

Por esp1433 

Hola a todos, nunca me esperé lo que ocurrió en mi habitación, gracias a Dios tengo un par de pechos grandes, redondos y firmes, me da gusto caminar por la calle y ver a los hombres quedarse mirando como rebotan con cada paso que doy y mis nalgas no son la excepción duras por practicar vóley bol, solo mido 1.68mts pero con unos tacones lo resuelvo.
Mi familia es tradicional Papá, Mamá y mi hermanito, él es un tanto travieso pero lo controlan.
En fin vivimos en un departamento en guerrero, el clima es muy caliente, por eso hay muchas ocasiones en que tomo mis cosas y voy a la playa, cuando entro a una plaza el aire condicionado hace que mis pezones se pongan duros, pero no me importa y camino entre las diferentes tiendas.
Zaira es una amiga que conozco desde la primaria y ahora que estamos por terminar el último año de secundaria platicamos de cómo será nuestra vida, rodeadas de todos esos chicos y chicas que encontraremos en la preparatoria, en cómo nos vestiremos porque es bien sabido por todos que en este grado los uniformes son cosa del pasado.
Zaira es más alta que yo, mide 1.70mts y con tacones es altísima tiene piernas largas no mucho pecho, pero eso si nalgas duras y redondas, que las luce con apretados pantalones y cuando vamos a la playa con diminutos bikinis.
A nuestros padres no les gusta que vistamos así en la playa dicen que ya tendremos edad para eso.
Zaira y yo empezamos a esconder nuestros bikinis y compramos de esos completos y de colores pálidos, calmando los reproches de nuestros padres pero al llegar a la playa nos quitamos los trajes amplios y nos quedamos en nuestros lindos y pequeños trajes de baño.
Una ocasión cuando nos quitamos los grandes y feos trajes de baño, uno de mis pechos se salió, Zaira se quedó mirándome no me incomodé porque la conozco de hace tiempo, reaccionó y me puso su toalla para cubrirme y poder acomodar mi top.
Muchas personas sobre todo hombres que pasaban por el lugar se dieron un buen taco de ojo con el espectáculo, el día transcurrió normal el sol pegaba muy rico y las olas del mar completaban el cuadro,, Zaira y yo nos pusimos bloqueador solar, Zaira se tumbó boca abajo en la arena, desaté las tiras de su bikini para comenzar con el masaje, recorría su espalda, hombros y nuca sentí unas muy agradable sensación al hacerlo incluso roce sus tetas por los costados y Zaira emitió un ligero y tenue ¡¡¡haaa!!! Puse más en sus piernas y al hacer contacto con su conchita sentí un calor más agudo que el sol mismo.
Abroché de nuevo su top, era mi turno, de igual forma me tiré en la arena, mi amiga desabrochó las tiras de mi top yo soy de cabello largo así que lo puso a un costado y comenzó con la aplicación de la crema sobre mi espalda.
Me puse chinita al sentir sus manos recorrer mi espalda, recorrió mi cuello, mis brazos y cuando sus manos rozaron mis costados, una electrizante sensación se apoderó de mi ¿qué me estaba pasando? Es Zaira, tal vez solo son las hormonas que a esta edad se portan como locas.
Lo deje a un lado y me puse a disfrutar del sol y el mar, por la tarde decidimos ir al cine y como siempre al entrar a la plaza nuestros pezones se pusieron duros, esta vez solamente teníamos puesto un delgado parejo, lo que provocó que fuéramos el centro de atención, incluso el guardia de seguridad se quedó con la mirada fija, fingiendo que estaba realizando sus labores.
Jijijiji nos encanta eso.


Debajo del parejo teníamos el top de nuestro bikini bien seco y gracias a esto nuestros pezones, o si nuestros pezones se marcaban mucho sobre estas dos y delgadas telas, escogimos una película de terror, la sala estaba casi vacía pero nos sentamos en la última fila hubo una escena en la cual me asusté tanto que apreté una pierna de Zaira ella puso su mano encima de la mía y así nos quedamos hasta que terminó, nos estiramos y salimos de la sala.
La invité a mi casa a cenar mis padres ya la conocían y su visita era normal, cenamos de lo más normal y al final le pedí que se quedara a dormir le dije que tendríamos una noche de chicas, sonriendo me dijo que sí le pidió permiso a sus padres y listo.
Pusimos fruta en un tazón y tomamos un par de refrescos, nos encerramos en mi cuarto y nos quitamos los parejos al fin y al cabo estábamos acostumbradas a vernos en bikini.
Platicamos de varias cosas incluso de lo sucedido en la tarde con mi top y de cómo se nos quedaron viendo en la plaza.
Imagínate si así se nos quedan viendo ¿cómo será en la prepa? y comenzamos a reír.
Mientras la fruta y los refrescos se terminaban la noche avanzaba y nuestra voz cada vez era más baja.
Zaira y yo somos vírgenes tenemos nuestros novios pero no pasa nada los muchachos de nuestra edad son muy miedosos y no se atreven a pasar los límites.
Zaira me pregunto si creía que los chavos de la prepa eran más aventados, le contesté que eso creía pero hasta no ver no creer, le dije que debían besar mucho más rico que en la secundaria y acostadas en la cama comenzamos a reír.
Imagínate como será le dije, Zaira contestó deberíamos estar listas para la prepa y otra vez las hormonas, me levanté y la bese, Zaira me empujó ¡Qué haces Ana! Me quede en silencio, Zaira se quedó sentada mirándome ¡esto no es correcto a mí me encantan los hombres! Le dije que yo también pero hoy en la playa había sentido muy rico cuando me puso el protector de sol y que el roce de sus dedos con mis tetas fue la cereza del pastel, Zaira me miró tomó mis manos y dijo yo sentí algo similar al sentir tus dedos en mis tetas pero eres mi amiga y lo tenía que olvidar, además eso no era el gusto de nosotras.
Mi corazón comenzó a latir muy rápido me acerqué a sus labios Zaira no dijo nada se quedó quieta, cerró los ojos, un rico y caliente aliento me recibió, comenzamos un beso largo y húmedo, nuestras lenguas comenzaron una lucha sin cuartel, mis manos rodearon su cuello con un objetivo, retirar su top, jale las correas de su cuello las de, la espalda y sus senos quedaron al descubierto, bese su cuello y ella daba pequeños sonidos ¡¡hummm!! ¡¡haaaa!! Comencé a bajar hasta meterme sus pezones en la boca, los chupaba y los mordía, nunca había tenido unos entre mis labios, Zaira me abrazó desabrochó mi top y lo sacó por encima de mi cabeza dejando al descubierto mis grandes tetas.
Mis pezones estaban duros y mis ansias eran tantas que mi conchita pedía a gritos ser perforada, mientras seguía comiéndome sus tetas deslizó su mano hasta encontrar mis pantis que para ese momento ya estaban muy húmedas metió su mano por debajo y froto mi clítoris, un frío e inmenso placer recorrió mi espalda provocando que la arqueara ¡¡¡haaaaaaaa!!!¡¡¡Sigue!!! Me despegué de sus tetas para disfrutar de la embriagadora sensación, me acosté tomo mis pantis de los costados, levanté un poco mi cadera para facilitar su tarea y las retiro.
Agachó su cabeza colocándola entre mis piernas y con el calor de su lengua comenzó a comerse mi conchita ¡¡¡haaaaaaaaaaaaaaa!!! Tomé una almohada para no hacer ruido la mordí y con mis manos arañaba las sabanas, era fabuloso tener a otra mujer chupando mi conchita, enredé mi mano entre su corto cabello ¡¡¡mássssssssss!!! ¡¡¡ha ha!!! Metió sus dedos y un chillido salió de mi ¡¡¡grrrrrrrrrrrrrr!!! Con sus manos alcanzó mis tetas apretando mis pezones arqueaba mi espalda y mi boca se abría como nunca antes.
Se sentó en sus piernas me levante y ataqué su boca, la besaba con muchas ganas me la quería comer, mis manos recorrían su espalda, las bajé hasta sus duras y redondas nalgas, la acosté y era mi turno arranqué sus pantis me tumbe encima de ella la sujeté de las muñecas y la fui besando hasta llegar a su conchita, estaba empapada y caliente su aroma me invitaba a probarla, saquee mi lengua y la recorrí desde la entrada de su vagina hasta detenerme en su clítoris, sentía la fuerza de sus manos y el movimiento de su cuerpo, mordí su clítoris y ¡¡¡haaaaaaaaaa!!! ¡¡¡que rico!!! No te detengas Ana esto es increíble, me levanté y puse una de mis piernas entre las suyas, nuestros chorreantes conchitas chocaron ¡¡¡haaaaaaaaaaa!!! Comenzamos a movernos yo sentía la humedad de su conchita combinada con la mía ¡¡¡ha ha ha ha!!! Salía de la boca de las dos ¡¡¡mmmmmm!!! ¡¡¡ha ha ha ha!!! ¡¡¡más más!!! Pedía y yo me movía cada vez más rápido.
Ya no nos importaba ser escuchadas solamente nos importaba gozar del cuerpo de la otra, al separarnos hicimos un 69 su lengua y sus dedos se apoderaron de mi conchita y yo no me quede atrás, era tanto lo caliente del momento que comenzamos a gemir cada vez más rápido ¡¡¡ha ha ha ha!!! ¡¡¡me vengo!!! ¡¡¡no te detengas yo también!!! ¡¡¡ha ha ha ha!!! ¡¡¡haaaaaaaaaaa!!! Nos vinimos de lo más rico un caliente y salado liquido salpicó mi cara no dudé en limpiarlo con mi lengua yo sentía su lengua recorriendo mi conchita creo que hacíamos lo mismo, me sentía húmeda y satisfecha levanté mi cuerpo cayendo exhausta en la cama, me di la vuelta y comenzamos a besarnos.
Se dio la vuelta y la abracé, nos quedamos dormidas hasta que la luz del día nos despertó su cuerpo desnudo y el mío eran evidencias de nuestro primer encuentro lésbico nos vestimos con nuestras ligeras prendas, me besó y al salir de mi cuarto me sentía satisfecha y extraña por lo sucedido.
Al siguiente día me habló para ir a la playa al vernos no dijimos nada de lo ocurrido, una sonrisa salió de nuestros labios nos tomamos de la mano y caminamos de lo más natural posible.
Ya estamos en la prepa, tenemos a nuestros novios pero en ocasiones nos encontramos en uno de los baños y nos besamos como si no hubiera mañana nuestras manos aprietan nuestras nalgas o nuestras tetas, metemos nuestros dedos en nuestras conchitas, ya perdimos nuestras respectivas virginidades pero creo que aquella noche ya las habíamos perdido.

¡¡¡mmmmmmmm!!! Me escurro al recordar mi cuarto en una noche de chicas.