Thursday, September 26, 2019

LGBT: El hijo de mi ex novia

Por Alex

Hacía unos días, en una agencia de viajes, me encontré a una exnovia que tuve cuando ella tenía 14 años y yo 17. Nos quisimos mucho, pero por circunstancias de la vida, después de dos años de noviazgo nos separamos, yo busqué otras novias y ella también, y al final cada uno nos casamos con otra persona. 

Yo me fui a USA por muchos años y regresé ya siendo un adulto mayor unos veinte años después.
Ese día después de más de 20 años, la volví a ver, había cambiado mucho físicamente, ya no era tan esbelta como yo la recordaba ni tan atractiva.
Me contó que tenía un hijo de 17-18 años que andaba buscando una beca y que si lo podía ayudar. Yo más que por curiosidad de ver cómo pudo haber sido mi hijo con ella, le dije que le dijera que me fuera a buscar a mi nuevo trabajo, en el gobierno, a ver que podía hacer.
Eran casi cerca de las 4 pm de un viernes, cuando la secretaria entró a mi oficina y me dijo que el joven XXXX me buscaba, que lo mandaba la Sra. …….
Me acordé de la conversación que había tenido con mi exnovia y le dije a la secretaria que lo dejara pasar y que se podía retirar por el día, que yo me encargaría de cerrar.
Debo contar que durante la mayoría de edad fui heterosexual, hasta que, en una convención en San Francisco, California, capital Gay de USA, en una zona conocida por San Francis Square, donde se puede encontrar con quien ligar, hombre o mujer, pero casi todos son gays o travestis, aunque no  lo parecen, un chico muy lindo y muy femenino, con un cuerpecito de mujer, como de 17 años se me acercó se me insinuó, me dijo que era muy  complaciente y que me iba a hacer disfrutar como nunca, que podía hacer lo que yo quisiera con él, y terminó convenciéndome de llevarlo a mi hotel y tuvimos sexo.  era un chico muy lindo, con un cuerpecito de mujer y muy femenino, y lo penetré oral y analmente. Fue algo delicioso y maravilloso, nunca había tenido sexo anal con nadie, pero ese chico me hizo sentir que era más rico que tener sexo anal con un chico joven que con una mujer. Sentir el esfínter anal dilatarse para dejar entrar la cabeza y entrar a ese canal y sentir lo súper apretado de un culito joven es algo indescriptible. Desde entonces me quedé enviciado con penetrar chicos jóvenes lindos y con cuerpos femeninos.
Nadie en mi entorno sabe de mis preferencias.
A los pocos minutos, tocaron la puerta y entró este chico como de 17 años, 1.68 m, unas 110 libras, vestido con un pantalón bien ajustado, anaranjado y camisa celeste tipo polo que le marcaba perfectamente su lindo cuerpo. Sentí como si el cielo se hubiera abierto y de ahí descendido el ángel más bello que jamás había vista en mi vida.
Piel color oliva, pelo negro lacio, un poco desordenado con un fleco en la frente, que le daban una frescura juvenil increíble. Carita jovial, cejas pobladas, ojos color miel, pestañas largas, negras, rizadas, nariz pequeña, recta, perfecta, respingada, labios carnosos, rosados, casi rojos, cuello delgado y esbelto, como el que tenía su mamá cuando éramos novios.
Espalda un poco ancha, la camisa tipo polo dibujaba perfectamente sus pequeños pezones, erguidos, abdomen completamente plano y lo que más me impresionó fue su estrecha cintura, bien formada, caderas anchas como de nena, piernas largas, gruesas, en fin, un Dios completo.
Me quedé mudo, totalmente anonadado, sólo alcancé a decir cierra la puerta y ponle seguro. Al darse vuelta, vi su lindo trasero, erguido, paradito, redondo, voluminoso, la raya del pantalón ya no podía entrar más en esas divinas nalgas, era como una segunda piel dibujando el trasero más lindo que hasta entonces haya visto. Deseaba abalanzarme sobre él y comérmelo ahí mismo, era divino.
También noté que sus gestos eran bastante amanerados y su voz cuando me saludó era bastante femenina. Este nene llevaba en la sangre el ser gay, si no lo sabía, faltaba poco para que alguien se lo hiciera saber.
Aparté mi silla del escritorio, e hice algo que nunca hago, pero con él no pude evitarlo, abrí las piernas, lo llamé, y lo puse en medio de ellas, lo agarré de su cintura y lo acerqué hacia a mí y le dije: Nunca creí que ibas a ser tan lindo. Él sólo dijo gracias, pero sorprendido y me vio un poco desconcertado ya que lo tenía en medio de mis piernas y abrazando su linda cintura, pero no hizo esfuerzo de retirarse.
No me digas que nunca te lo han dicho le dije. No, así no me dijo con voz amanerada.
No te creo le dije, eres el chico más lindo que he visto en mucho tiempo, estoy seguro de que muchas chicas y más de algún chico han de querer andar contigo. No, me dijo, nunca, no hasta ahora, no
¿No tienes novia? NO, ¿novio? Nooo, tampoco como cree.
¿Por qué no si eres tan lindo? No sé, es un poco complicado dijo, siempre con voz amanerada y femenina.
¿Alguien se te ha insinuado, chica o chico? No, ¿Por qué me pregunta? (siempre con ademanes y voz femenina)
Es que no te creo, un chico tan lindo y atractivo como tú ha de tener docenas de chicas y chicos detrás de ti, ¿quizás algún profesor de la escuela o colegio? No, tampoco.
Ummmm, bueno. ¿Dime tienes hermanos, hermanas?
Si, somos una hermana dos años mayor, yo, una hermana menor, y mi mamá. Mis padres se separaron hace años.
Eso explicaba muchas cosas, el chico vivía rodeado de mujeres, sin figura masculina que imitar, así que su ejemplo era sólo las mujeres a su alrededor.
¿Sabes, es difícil creer que no tengas a alguien? Eres tan lindo y atractivo, tienes un cuerpo precioso y llamativo y dan ganas de abrazarte, estrecharte, acariciarte, besarte y poseerte.
¿poseerme? ¿Qué quiere decir con poseerme?
No me digas que no sabes lo que quiero decir con poseerte, eres tan lindo, tienes el trasero más lindo que he visto, (le apretaba y sobaba las nalgas descaradamente) hacerte el amor, hacerte mío, penetrar esto, (apretando sus divinas nalgas) querer estar dentro de aquí y seguía sobando sus deliciosas nalgas y punteando la entrada de ese culito tan delicioso
¿Dentro de mí? ¿Qué? ¿qué quiere decir estar dentro de mí?
¿No sabes? Penetrar este lindo trasero que tienes, y hacerte mío, hacerte el amor, para que sepas que gozar al máximo del sexo entre hombres. Siempre apretando y sobando sus ricas nalgas
Pero yo no soy gay, eso lo hacen solo los gays, yo no soy gay
¿Nunca lo has pensado? ¿pensar Qué? Que te penetren este precioso culito que tienes, Estar con otro hombre, que te haga suyo ¿No te llaman la atención tus compañeros cuando los ves desnudos en el gimnasio, o en la piscina?
En realidad, no, no voy al gimnasio seguido, no me gusta mucho la actividad física, nunca lo había pensado así.
¿Te masturbas? ¿cuándo lo haces piensas en chicas, chicos, profesores, amigos?
Casi no lo hago. Mi mamá es muy estricta, casi no tengo privacidad.
Sí, pero cuando lo haces, ¿en qué piensas? En nada en particular, excepto en una fantasía que tengo, lo hago, pero no muy seguido.
¿Y esa fantasía es con un hombre? No dijo nada, se quedó callado, lo que yo tomé como un si
¿Por qué, no te gusta cómo se siente?
Sí, es rico, pero casi no tengo la oportunidad de estar solo para hacerlo.
¿y si alguien te lo quisiera hacer, te dejarías? No sé, nunca nadie me lo ha pedido. Sí, pero si alguien te lo pidiera ¿dejarías que alguien te lo hiciera? Es más rico si alguien más te lo hace ¿sabes?
No sé, quizás sí, depende de las circunstancias, si nadie nos mira y guarda el secreto, quizás sí.
¿Te la han chupado alguna vez? NOOO
¿has pensado en que te lo hagan, o quizás en hacerlo tú? Nooooo.
¿Has visto porno en el internet, sexo entre chicos?
Solo una vez en un ciber, por unos minutos. ¿Te gustó lo que viste?
Si, era excitante, ¿Por qué ya no seguiste viendo? Es que me dio pena
¿porque? Si todos los chicos que llegan ahí a eso van, a ver porno o a chatear con otros chicos para luego quedar en algo. Algunos salen con hombres mayores por diversión o por dinero. ¿Tus amigos nunca te han platicado de eso? ¿De qué? De estar con otro hombre. No Nunca
En la casa, cuando estás solo, ¿no ves porno?  No, en la casa no se puede. ¿y en un ciber? Nooo. Me da pena que otros chicos me vayan a ver viendo eso
¿hay chicos gays en tu escuela? Sí, creo que hay varios que son gays por lo que comentan unos compañeros, pero no soy amigo de ellos, siempre andan juntos y casi todos lo saben.
¿Algún compañero te ha tocado por detrás? Ummm, bromeando sí, pero nada más- ¿te gustó? ¿el qué? Que te tocaran, ¿sentiste rico? umm, si es diferente. ¿te gustó? Sí, creo que sí. ¿te gustaría que alguien te tocara y te acariciara por detrás, es bien rico? No sé, no estoy seguro, nunca me lo han hecho, así como usted dice a propósito. ¿Te gusta que yo te esté sobando aquí atrás? Siii, quieres que siga, si, si usted quiere.
¿Te gusta besar? ¿usted dice en la boca? Si, en la boca como los novios, Nunca le he hecho. ¿te gustaría saber cómo se siente? Es bien rico.
No sé, ¿con quién lo haría, no tengo novia?
No tiene que ser una novia, besar es un acto erótico muy bonito, lindo, rico, se hace también entre hombres, aunque no sean novios. Sí, he oído eso
Mira, hay muchas cosas que tienes que aprender, yo te puedo enseñar si quieres, pero tendría que ser un secreto entre tú y yo, nadie puede saber, mucho menos tu mamá o tus hermanas. ¿te gustaría?
No sé, quizás sí, pero ¿dónde? ¿cuándo y con quién lo haría?
Durante todo este tiempo lo tenía abrazado junto a mí, apretando su linda cintura y una mano en su nalga izquierda sobándola y yo viendo hacia arriba a su linda cara, sus ojos con sus largas y rizadas pestañas eran un ensueño, él tenía sus manos apoyadas sobre mis hombros, yo casi pensaba que era como caricia y no para apoyarse.
¿Cuánto tiempo más tienes?, ya son casi las cinco. ¿a qué hora tienes que regresar a casa? Ummm, mi mamá va a regresar como a las 7 y media, tengo hasta como las siete. Entonces tenemos casi dos horas para estar juntos ¿Quieres que te enseñe algunas cosas?
Te va a gustar mucho.
Si usted quiere y no le va a contar a nadie sí, sí me gustaría, pero tiene que ser en secreto, nadie se puede enterar. No, nene, nadie va a saber. Sólo tú y yo. Bueno, entonces si
Ven, vamos al otro cuarto, ahí nadie entra, solo yo tengo llave.
Lo tomé de la mano y lo guíe al otro cuarto, que es un cuarto privado de reuniones, con una mesa grande y sillas cómodas y un sofá grande de cuatro plazas, casi como una cama. Mira le dije, le voy a poner seguro a la puerta, para que estés más tranquilo.
Lo senté en el sofá y yo a su lado izquierdo, le tomé la mano izquierda y comencé a acariciarla, sobarla, apretarla, mientras acercaba mi cara a la suya y le decía Eres divino, tienes una boca preciosa un cuello erguido muy sexy, él solo me miraba sorprendido y sonreía.
Mira le dije: Si alguna vez hicieras el amor con alguien, con quien sea, chica, chico, persona mayor o no, ¿Cómo sería que te gustaría hacerlo, ¿cómo quisieras que te trataran? Dilo con confianza, solo es una suposición, una imaginación.  ¿Cómo te gustaría que fuera?
Vamos, no tengas pena, solo es una suposición, ¿dime cómo quisieras que fuera tu primera vez?
Bueno,(con  gestos más femeninos)  me gustaría que me mimaran, que me acariciaran, que me abrazaran fuerte, que me estrecharan en sus brazos, que abrazaran mi cintura y me acercaran a su cuerpo, que me besaran el cuello, que me mordieran los labios con suavidad, que me besaran los pechos con pasión, que me acariciaran las piernas, que me apretaran y acariciaran las nalgas, que me metieran los dedos ahí atrás y que me penetraran de forma ruda, fuerte, brusca, que me hicieran llorar de dolor ahí atrás,  que me violaran, una y otra vez, y que me llenaran de semen mi culito, que me quede doliendo por días para acordarme toda la vida de la primera vez.
Vaya, pensé, el nene quiero sexo rudo. Además, no pensaba en que él fuera el que penetraba, sino que, al revés, que a él lo violaran, que es el caso de muchos pasivos
De repente como que volvió a la realidad, siempre con mates femeninos, bueno, dijo, eso es una suposición, lo leí en una novela y se me quedó gravado y de vez en cuando lo recuerdo y ahí es cuando me masturbo y siento muy placentera la situación, pero solo es mi imaginación, no crea que eso es lo que quiero de verdad, solo son fantasías mías.
O sea que tu quisieras que tu primera vez fuera con otro hombre. No, no solo la primera vez, sino siempre. Nunca se lo he dicho a nadie, pero no quiero hacerlo con chicas, sino con un hombre mayor que yo, que me domine, que me mande a obedecerle, que me posea como quiera, con rudeza y firmeza, pero sin hacerme daño, que me trate con cariño, que me ame por lo que soy y como soy
Bueno, yo sé que eso no va a suceder, (siempre con gestos muy femeninos) a menos que me vaya donde están las maras, (pandillas) pero ahí me pueden matar.
No es necesario que vayas a lugares como esos. Lo que quieres lo puedes encontrar aquí mismo.
¿Aquí mismo? ¿cómo?
Yo te lo puedo hacer, tal vez no exactamente como tú lo tienes en mente, pero bastante similar. ¿Siii, de verdad, cómo?
Mira tenemos un poco más de una hora y media de tiempo, suficiente para experimentar algo si quieres hacerlo.
¿Con usted? Si, conmigo, ¿cómo, aquí adentro? Nos van a ver o a oír.
No, ya te dije que no, es viernes ya son casi las cinco, ya todos se fueron, solo está el vigilante que está allá afuera en el portón de la calle, lejos de aquí, nadie nos va a ver o a oír. ¿Usted cree, se puede aquí? Sí, se puede. ¿nadie va a venir? No, ya te dije que solo yo tengo llave de este cuarto y ya todos se fueron, es viernes, nadie va a venir, estamos solos tú y yo.
Mira, párate, lo puse entre mis piernas de nuevo, quítate la camisa.
Se paró, levantó sus lindos brazos y se quitó la camisa, dejando su lindo torso completamente desnudo, sus lindos pezones erectos, sus axilas depiladas como mujer, su pecho y abdomen completamente plano y sin vello corporal, era una estatua de marfil, con una cintura de ensueño, el elástico rojo del bóxer sobre salía un poco sobre su apretado pantalón, haciendo más sensual la escena
Lo acerqué tomándolo de la cintura con una mano y la otra la puse en su nalga izquierda, la cual apreté contra mí con mucho cariño. Abrí mi boca y me introduje su pezón derecho y comencé a succionarlo con mucha pasión, pero también con delicadeza y darle pequeños mordiscos. Apretaba su cintura contra mi cara y pecho, masajeaba sus ricas nalgas y el comenzó a gemir de placer y su entrepierna comenzó a crecer.
Me aparté un poco, le desabroché el cinturón y le desabotoné el pantalón y lo bajé hasta las rodillas junto con su interior, quedando completamente desnudo de las rodillas para arriba.  Quítatelo todo le dije, lo cual hizo mientras yo seguía mamando su tetita derecha y masajeando sus duras y redondas nalgas, eran deliciosas. Quedó completamente desnudo frente a mí. Seguí succionando sus tetitas, alternando una y otra, cada vez con más fuerza, pero sin hacerle daño, él se dejaba, parecía que le gustaba, porque me apretaba los hombros con sus manos. ¿te gusta? Sí, pero no tan fuerte, No me vaya a dejar seña dijo, mi mamá me puede ver. Seguí así por un buen rato, mamando sus tetitas con pasión, dándole mordiscos en los pezones, succionando como si fuera un becerro hambriento, apretando sus duras nalgas y sobándolas con más fuerza y atrayéndolo hacia mi abrazando su linda y estrecha cintura.
Bajé mi cabeza hacia su pene que ya estaba bien erecto y babeando precum, me lo introduje en la boca y comencé a darle una rica mamada, me lo metía lo más que podía, y con la misma saliva, mojé mi dedo medio derecho y busqué su rayita, no fue fácil por el tamaño de sus nalgas, pero logré apartarlas y empecé a puntear su hoyito. Logré meter la punta del dedo medio y dio un respingo, pero no se quejó. Seguí empujando, hasta logar meterlo todo, estaba bien apretado y comencé un mete y saca, al principio costó un poco por lo apretado que estaba, pero después de unos minutos ya entraba y salía con facilidad, el apartó un poco sus piernas como dándome más espacio para que entrara mi dedo. aproveché para meter otro dedo y así otro más. Lo estaba penetrando con mis dedos y no se quejaba. Seguí mamando esa rica verga por varios minutos y cogiéndolo con mis dedos, y con la otra mano masajeaba su tetita derecha, el solo gemía. Después de varios minutos de meter y sacar con mis dedos, y mamarle la rica verga y masajear uno y otro pezón, su verga comenzó a crecer más, se puso más dura y lanzó su primer chorro de rico semen de adolescente, caliente, espeso, abundante, algo salado y dulzón, apretó mis hombros con más fuerza, me la empujó más adentro y soltó tres chorros más, los cuales tragué con fruición, era delicioso, yo solo oía aggg. Aggg. Aggg. Con cada chorro que expulsó en mi boca apretaba con su recto mis dedos que estaban dentro de su culito, era deliciosa esa sensación. La lamí toda y la dejé limpia. saqué los dedos de su culito, me desabroché el pantalón, me lo bajé hasta las rodillas, Agáchate le dije y lo puse entre mis piernas apoyado sus manos en el sofá, ahora haz tú lo mismo le dije ¿quéeee? Sí, Métetela en la boca y haz lo mismo que yo te estaba haciendo, solo que no uses los dientes. Nunca lo he hecho, no sé cómo hacerlo, has lo mismo que yo te hice, no importa si nunca lo has hecho, ya aprenderás
Se apoyó en el sofá, inclinó la cabeza hacia mi polla y se la metió, eso dejó sus divinas nalgas en pompa a mi disposición. Introduje de nuevo mis dedos en su apretado culito y comencé a moverlos de nuevo.
Encontré su punto “G” y comencé a estimularlo, paró un momento, ¿Qué es eso dijo? Siento que voy a orinar, ¿Qué está tocando? Lo siento hasta aquí adentro en el ombligo dijo.
Es tu punto “G” mi amor, le dije, ya te vas a acostumbrar, deja que siga y seguí disfrutando de ese rico y apretado canal. Solo los que sabemos dónde está ese punto disfrutamos de estimularlo dentro de ese estrecho y apretado canal de amor y placer. Siguió mamando, cada vez lo hacía mejor, le daban arcadas cuando yo le ponía la mano detrás de la cabeza para empujarla hacia abajo y que le entrara más, sus ojos lagrimeaban, con cada arcada me apretaba los dedos que tenía dentro de su culito, Dios, que sensación más rica. Me tocaba el tronco como para impedir que entrara más, pero también me acariciaba los testículos
Después de varios minutos de estimular su punto “G”, con el mete y saca de mis dedos en su apretado canal, su recto comenzó a contraerse con fuerza de nuevo y apretar más mis dedos. Agg. Aggg. apretó más mi pene con sus labios, y con la mano derecha que tenía rodeando mi pene, aggg, aggg, me vengo me dijo y expulsó varios chorros de caliente semen que cayó en el suelo, su culito apretaba más mis dedos y yo aproveché para meterlos más adentro.
Después de que las contracciones cesaron, le dije párate y daté vuelta de espalda y siéntate encima de mí, él solo obedeció, se dio vuelta, me puse abundante saliva en mi pene y en su entrada y lo guíe y comenzó a descender y se sentó encima de mi pene dándome la espalda. Costó mucho que entrara por ser su primera vez y no tenía mucha lubricación, pero yo empujé fuerte para arriba y entró la cabeza: Ayy, Ayy, me duele, me duele dijo, pero yo no le hice caso y seguí empujando hasta que entró más de la mitad. Lo agarré de la cintura y lo movía para abajo, al mismo tiempo que con mi pelvis empujaba mi pene hacia arriba para que entrara más. Ayy, ay, duele, duele, pare, mas despaciooooo por favor, dueleeee mucho. Yo no le hacía caso, estaba loco penetrando ese estrecho y apretado canal lo baje más hasta que mi pelvis chocó con sus ricas nalgas, le había entrado toda.
Yo sentado en el sofá y él medio inclinado con sus piernas a cada lado y sosteniéndose con las manos en mis piernas, como para no bajar más y que no le entrara más, Yo empujaba mi pelvis hacia arriba con movimientos fuertes, para que la punta de mi pene tocara lo más profundo de su recto, distendiendo las paredes de ese apretado canal, quería que sintiera cada embestida con dolor y placer. Aggg. aggg. Uhhh. uhhh, A los pocos minutos él solo comenzó a moverse de adelante para atrás, y yo de arriba para abajo y comenzó a gemir más fuerte: aggg, aggg. Agg. Que rico decía. Yo estaba loco, estaba súper apretado. Así lo tuve sentado encima de mí por varios minutos, y con mi mano derecha masturbaba su pene que comenzó a crecer de nuevo, le besaba la espalda, le mordía la nuca, lo apretaba más fuerte contra mí como para que no se escapara.
Aggg, aggg, ay, ay, ploff, ploff chocaban sus nalgas con mi pelvis. En ocasiones agarraba la punta de los dedos de su mano derecha y los llevaba a la entrada de su culito, para sentir el tronco de mi verga y la tocaba, yo no sabía si era para cerciorarse de cuanto tenía adentro o para empujar y dirigirla más al centro o a un lado u otro, yo Estaba en la gloria. Ploff, ploff, ploff, agg, agg, agg. Así lo tuve sentado encima de mi como 10 minuto más, estaba súper apretado, emitía sonidos aggg, aggg, ufff, ufff, ahhh. Ahhh,
Después de un rato, espera, párate le dije, se la saqué, pluck sonó cuando mi pene salió de su culito él me vio extrañado, no hemos terminado le dije, acuéstate en el sofá boca arriba y me puse entre sus piernas, las cuales las tomé y las llevé hasta su pecho, quedando su hoyito totalmente expuesto, estaba un poco rojo y dilatado, su pene bien erecto apuntando hacia su ombligo. tomé sus pies y los puse en mis hombros, apunté mi pene en el centro y se la volví a meter de un solo como él quería. Ayy, ayy, despacio, despacio, Yo no le hice caso. Se la sacaba completamente y se la volvía a meter de un solo: Ayy, ayy, así no, me duele, me duele mucho, . Así dijiste que querías le dije, hoy te aguantas, sí, pero yo no creí que doliera tanto, despacio por favor, que me duele. Aguanta le dije y repetí esa acción como 20 o 25 veces, quería hacerle daño como él lo había pedido. Sentía como su esfínter se dilataba y se estiraba cuando la cabeza lo traspasaba y entraba en ese apretado canal, ayy, ayy, no tan fuerte, más despacio decía. Sentir esa sensación de dilatar el esfínter cuando entra la cabeza, como si estirara una correa de hule para dejar pasar la cabeza y entrar en ese estrecho canal, sacarla y volver a sentir ese anillo de carne dilatarse de nuevo al salir y repetir esa acción varias veces es lo más rico que hay cuando se penetra un culito virgen
Después de varios minutos de estarlo penetrando salvajemente, Ya no aguanto me dijo, déjeme descansar un ratito y después seguimos, me duele mucho.
No, tu querías que te doliera por varios días, así que hoy te aguantas, además no tenemos mucho más tiempo, y seguí embistiéndolo sin compasión, agarré su pene y comencé a masturbarlo de nuevo para distraerlo. A los pocos minutos comenzó a gemir más fuerte aggg, aggg, aggg, su recto comenzó a contraerse rítmicamente de nuevo y con cada contracción, de su pene salieron disparados varios chorros de espeso y caliente semen que cayeron en su pecho, su cara y su pelo, aggg, aggg, aggg, uff. Uff. Agg. agg.
Que divino dijo exhausto, qué rico, aunque me dolió mucho. Mi pene todavía dentro de él, su recto palpitando, apretando mi pene. Lo saqué lentamente, el me vio asombrado.
No hemos terminado todavía le dije ¿Quéeee? ¿todavía nooo? No, le dije, falto yo, yo no he terminado todavía, ¿Qué más me va a hacer, yo creí que eso era todo? No, Yo no me he corrido todavía le dije.
¿Dónde quieres la lechita? Cansado me dijo donde usted quiera.
Hacéte más para abajo le dije y se corrió para un extremo del sofá. Me puse encima de él, mi pelvis en su boca, abre la boca le dije y le introduje mi pene entero en su boca, lo más profundo que pude y comencé a embestir su boca como si fuera una vagina, mi pelvis estaba sobre su cara, mi vello púbico tapaba su boca y su nariz, no puedo respirar decía, sáquela que me ahogo, aguanta le dije y seguí embistiendo lo más fuerte que podía. Mi pene había perforado el anillo de la faringe y estaba en su garganta, entraba y salía, ocasión que él usaba para respirar, me ahogo decía, déjeme respirar,
No le hice caso. Así estuve fornicando su boca por unos 5 minutos más y comencé a darle más profundo hasta que mi pene se puso más duro y más grueso y solté el primer chorro directo en su garganta, el cual tragó, saqué un poco mi pene para que los siguientes chorros le quedaran en la boca y pudiera saborearlos. Trágalos le ordené y seguí escupiendo unos más. Se los tragó todos- Déjala completamente limpia le dije, lo cual hizo. Me miraba como con admiración o temor con sus lindos ojos color miel y sus largas pestañas y seguía chupando y lamiendo todo el resto de mi semen, pareció gustarle, porque la lamía con la lengua y se tragaba los pocos restos de semen que seguían saliendo, la dejó limpia,
Me levanté de encima de él, le di la mano para que él se sentara y descansara.
Me costaba respirar me dijo, es usted muy brusco, no me hizo caso. Eso querías ¿no?, Eso me dijiste. Sí, pero era solo imaginario, lo que usted me hizo fue diferente, fue muy rudo, brusco, grosero, desconsiderado, no me dejaba respirar, sentía que me iba a ahogar con su cosa en mi garganta y sus pelos tapando mi boca y mi nariz.
Me duele la boca, la quijada, la garganta, me duelen los pezones, no aguanto mi culito y ahora no puedo ni hablar ni tragar, todo por su culpa. No sé si voy a poder caminar derecho, tengo los músculos engarrotados (palabra que usamos para decir contraídos, adoloridos) y estoy ronco, no sé qué le voy a decir a mi mamá, no voy a poder sentarme a cenar ni tragar la comida sin dolor de garganta y ella se va a preocupar mucho, todo por su culpa.
No mi amor, yo solo te hice lo que tú querías que te hicieran, perdona si me excedí un poco ¿Un pocooo? ¿Un pocooo? Si me ha dejado todo inútil, casi no me puedo parar, me duele todo, ¿Cómo voy a llegar a la parada del bus?
No te preocupes mi amor, en unos minutos vas a estar bien
Ah, sí, ¿y esa sangre en el sofá? ¿de dónde cree que viene? De mi culito y me pueden descubrir. No mi amor, antes de irte te limpias bien, la ropa no está manchada, te pones bastante papel higiénico entre las nalguitas como si fuera una toalla sanitaria de mujer, ya no vas a sangrar, eso solo es al principio.
Mi mamá lo va a notar. No si te lo pones bien, yo te voy a ayudar a ponerlo para que no se note, además, yo te voy a llevar en mi carro cerca de tu casa para que no camines a tomar el bus y descanses tu culito y estires las piernas un poquito.  Ya es tarde.
Al llegar a tu casa rápido te cambias el pantalón y te pones un short oscuro holgado, el calzoncillo va a sostener el papel, nadie va a notar nada. Sí, eso es fácil de decir para usted, no conoce a mi mamá, sospecha de todo, me va a ver caminar todo raro cuando suba las gradas al segundo piso.  No, le dije, le puedes decir que al bajarte del bus te resbalaste si acaso te costara subir las gradas, que no creo y te apresuras a cambiarte.
No me va a creer, No nene, todo va a estar bien, no tienes que darle a sospechar nada, haz lo que te digo, ya verás que todo va a estar bien, no te preocupes
Sí, usted se queda tan tranquilo y yo me voy todo maltrecho y adolorido, a usted no le importo yo, solo su satisfacción personal, me hizo todo lo que quiso y ni siquiera me preguntó si yo quería. No, no es así. Además, creo que te gusto ¿no? Sí, me gustó, pero me dolió mucho y a usted no pareció importarle, casi me asfixia con su cosa en mi garganta. No mi amor, eso no es cierto, me importas mucho, más ahora que te he probado y sé que estás bien rico y delicioso de ahí atrás y de todos lados y quiero que regreses todas las veces que quieras, quiero hacerte mío muchas veces más.
¿Entonces nos vamos a volver a ver de nuevo, y no solo me usó una vez y ya estuvo?
A ver, A ver, dígame.  ¡Quiero saber, dígame! ¿y la beca? Yo me dejé hacer todo esto porque me dijeron que me iba a dar una beca, a ver, ¡dígame|

Continuará

Alex













No comments:

Post a Comment

ENCUENTROS - EROTISMO EN CANTO-RELATO-POESIA

  A todos los poetas eróticos, se les invita que envíen sus poemas grabados a Radio Nuestra America, en su programa Encuentros. Una radio al...